Hoy bajando por el cerro ví a la Sra de los gatos, no sé su nombre, pero desde hace mucho tiempo que tiene esa obsesión por los felinos, tanto es así que recuerdo cuando era chica iba a comprar a la plazuela con una hermosa gatita siamesa...y como tiene que pasar por mi casa, aprovechaba de saludar a mi gato, que por cierto ni la pescaba. La Sra de los gatos vive sola y le gusta escuchar música española, al parecer debe tener raíces ibéricas, pero como suele suceder debe tener su tatatatatabuela española. Tiene su jardín muy limpio y ordenado. En las mañanas sagradamente saca a sus gatos, se sienta en su patio y los peina, les saca las pulgas y toma sol.
Su vecina es una señora, que tiene muchos animales en su casa, siempre me ha llamado la atención un gallo (de verdad) que tiene en el living y que se asoma de vez en cuando por un pequeño agujero que hay en la puerta en donde salen al patio sus compañeros, o sea los perros y los gatos. Al pasar por su casa siempre hay un olor bien fuerte...a animales.
Y yo vivo más arriba, tengo un perro que no hace nada y un gato que duerme todo el día, trato de mantener el patio bonito y limpio, pero no lo logro...no saludo a estas vecinas, son raras (lo mismo deben pensar de mí), pero las conozco desde que era chica, sólo mi abuela acostumbraba a saludarlas y bueno como abuela se sabía toda la historia de las y los vecinos, que por cierto son muy entretenidas.
Este cerro y creo que los barrios en general siempre tienen ciertos personajes, con vidas y costumbres distintas, sus rostros por lo general reflejan la imagen de su casa...
Creo que soy un personaje también, es extraño, no?
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